“Todo tiene su final….nada dura para siempre” dice la Canción del Salsero desaparecido Héctor Lavoe. Y así fue para el evento Poliana Tour 2007 realizado en el Hotel Decámeron en Panamá del jueves 9 al 12 de agosto del presente año. El telón cayó el domingo 12 de agosto a las 13:00 p.m., cuando desalojamos el Hotel y nos encaminamos de regreso a la Ciudad de Panamá.
Sin embargo, las agradables compañías de viejas amistades continuaron hasta el sábado 18 de agosto fecha en la cual emprendió su viaje de regreso a Suecia, nuestro hermano Raúl Valeria. Un día antes, había hecho lo mismo pero, con destino a Inglaterra, otro “brotherazo”, Rodrigo Vera.
Al final, fueron 5 países los que estuvieron representados en el evento: Costa Rica en las personas de Eddy Sánchez y Alvaro Salas; Nicaragua por Jorge Baca, Persy Rodríguez y José Ramón Torres; Chile por Raúl Valeria y Rodrigo Vera; Ecuador por Diego Endara y Gerardo Andy, Panamá, como país anfitrión, por Elena Ruíz, Ameth Cedeño, José Cedeño, Enier Portugal, Abraham González y Rigoberto González. En total 14 participantes, algunos con esposas e hijos (as) que ampliaron mucho más la convivencia.
En realidad los reencuentros, las emociones, las nostalgias y las alegrías iniciaron el lunes 6 de agosto cuando arribó a suelo panameño, desde Inglaterra, Rodrigo Vera. Como primer visitante en arribar, el compañero Vera fue recibido con todos los honores. El miércoles 8 de agosto, en horas de la tarde llegaron Alvaro Salas y Eddy Sánchez. Es de destacar el reencuentro de Alvarito y Enier, amigos y compañeros de muchas historias en Dervenitza.
Este pequeño grupo de 5 personas (Rodrigo, Enier, Eddy, Alvarito y Rigoberto) buscó un restaurante para cenar y tomarnos unas cervezas panameñas para luego partir nuevamente al aeropuerto a esperar a Raúl Valeria que luego de más de 20 horas llegaba finalmente al país canalero. Y entonces se prendió la mecha, a celebrar se ha dicho!!...y el pequeño ágape se extendió hasta altas horas de la madrugada.
El jueves 9 de agosto llegó Jorge Baca y su familia quienes partieron directamente desde el aeropuerto hasta el hotel. Los ticos y los chilenos, conjuntamente con los panas: Rigo y Enier, viajaron juntos en autos particulares hacia el Decamerón. Ya en el hotel procedimos al registro y ubicación de los visitantes en sus respectivas habitaciones.
Quedó establecido el punto de reunión en un Restaurante del complejo turístico a las 17:00 p.m. Luego de una suculenta cena e intercambios de anécdotas partimos a recorrer la vida nocturna del complejo que se extendió hasta altísimas horas de la madrugada y que dejo muchas historias que serán narradas en posteriores escritos.
Queremos reconocer el esfuerzo realizado por amigos (as) de otros países como Ecuador, Cuba, Nicaragua y El Salvador por asistir a la actividad pero que semanas antes les surgieron inconvenientes de última hora que les impidieron asistir. En verdad, los extrañamos.
Sería injusto evaluar este evento por la cantidad de asistentes. Como menciona Eddy Sánchez de Costa Rica, “se cumplió con el objetivo: dar el primer paso y romper esa inercia de casi 20 años. De seguro que en el próximo encuentro seremos más y los objetivos serán otros”. Desde ahora les adelanto que el próximo evento fue fijado para enero de 2009 en la tierra de los pinoleros: Nicaragua. Así que amigos nicaragüenses a ponerse las pilas en esta organización.
Para concluir, En Panamá lo importante fue lograr reunirnos, compartir momentos y memorias. Son muchos los agradecimientos que recibimos por haber logrado la oportunidad de brindar a estos amigos la oportunidad de compartir gratos momentos.
Sin embargo, las agradables compañías de viejas amistades continuaron hasta el sábado 18 de agosto fecha en la cual emprendió su viaje de regreso a Suecia, nuestro hermano Raúl Valeria. Un día antes, había hecho lo mismo pero, con destino a Inglaterra, otro “brotherazo”, Rodrigo Vera.
Al final, fueron 5 países los que estuvieron representados en el evento: Costa Rica en las personas de Eddy Sánchez y Alvaro Salas; Nicaragua por Jorge Baca, Persy Rodríguez y José Ramón Torres; Chile por Raúl Valeria y Rodrigo Vera; Ecuador por Diego Endara y Gerardo Andy, Panamá, como país anfitrión, por Elena Ruíz, Ameth Cedeño, José Cedeño, Enier Portugal, Abraham González y Rigoberto González. En total 14 participantes, algunos con esposas e hijos (as) que ampliaron mucho más la convivencia.
En realidad los reencuentros, las emociones, las nostalgias y las alegrías iniciaron el lunes 6 de agosto cuando arribó a suelo panameño, desde Inglaterra, Rodrigo Vera. Como primer visitante en arribar, el compañero Vera fue recibido con todos los honores. El miércoles 8 de agosto, en horas de la tarde llegaron Alvaro Salas y Eddy Sánchez. Es de destacar el reencuentro de Alvarito y Enier, amigos y compañeros de muchas historias en Dervenitza.
Este pequeño grupo de 5 personas (Rodrigo, Enier, Eddy, Alvarito y Rigoberto) buscó un restaurante para cenar y tomarnos unas cervezas panameñas para luego partir nuevamente al aeropuerto a esperar a Raúl Valeria que luego de más de 20 horas llegaba finalmente al país canalero. Y entonces se prendió la mecha, a celebrar se ha dicho!!...y el pequeño ágape se extendió hasta altas horas de la madrugada.
El jueves 9 de agosto llegó Jorge Baca y su familia quienes partieron directamente desde el aeropuerto hasta el hotel. Los ticos y los chilenos, conjuntamente con los panas: Rigo y Enier, viajaron juntos en autos particulares hacia el Decamerón. Ya en el hotel procedimos al registro y ubicación de los visitantes en sus respectivas habitaciones.
Quedó establecido el punto de reunión en un Restaurante del complejo turístico a las 17:00 p.m. Luego de una suculenta cena e intercambios de anécdotas partimos a recorrer la vida nocturna del complejo que se extendió hasta altísimas horas de la madrugada y que dejo muchas historias que serán narradas en posteriores escritos.
Queremos reconocer el esfuerzo realizado por amigos (as) de otros países como Ecuador, Cuba, Nicaragua y El Salvador por asistir a la actividad pero que semanas antes les surgieron inconvenientes de última hora que les impidieron asistir. En verdad, los extrañamos.
Sería injusto evaluar este evento por la cantidad de asistentes. Como menciona Eddy Sánchez de Costa Rica, “se cumplió con el objetivo: dar el primer paso y romper esa inercia de casi 20 años. De seguro que en el próximo encuentro seremos más y los objetivos serán otros”. Desde ahora les adelanto que el próximo evento fue fijado para enero de 2009 en la tierra de los pinoleros: Nicaragua. Así que amigos nicaragüenses a ponerse las pilas en esta organización.
Para concluir, En Panamá lo importante fue lograr reunirnos, compartir momentos y memorias. Son muchos los agradecimientos que recibimos por haber logrado la oportunidad de brindar a estos amigos la oportunidad de compartir gratos momentos.
